ese viernes por la noche, después del partido, tuve un sentimiento que no sé si seré capaz de describir alguna vez, salvo por su calidez. él y ella me llevaron a una fiesta esa noche, y yo iba en el asiento del medio, en su camioneta. a él le encanta su camioneta porque dice que le recuerda a su padre. el sentimiento que tuve surgió cuando ella le dijo a él que buscara una emisora de radio. y él no paró de encontrar anuncios. y anuncios. y una canción de amor malísima con la palabra "baby". y después más anuncios. y por fin encontró una canción verdaderamente increíble que trataba de una chica, y todos nos quedamos callados. él seguía el ritmo con la mano en el volante. ella había sacado la mano fuera del coche y hacía ondas en el aire. y yo simplemente estaba ahí sentada entre los dos. cuando la canción terminó, dije algo:
-me siento infinita.
y ellos me miraron como si hubiera dicho lo mejor que habían escuchado nunca. porque la canción había sido buenísima y porque todos le habíamos prestado verdadera atención. cinco minutos únicos en la vida que habíamos empleado de verdad, y nos sentíamos jóvenes en el mejor de los sentidos. después compré el disco, y te diría cuál es, pero lo cierto es que no lo entenderías a no ser que estuvieras yendo en coche a tu primera fiesta de verdad, y fueras en el asiento del medio de una camioneta con dos buenas personas en el momento en el que empieza a llover.
acceso direto a la canción que escuchas en una camioneta de camino a una fiesta en el momento en que empieza a llover.
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