bienvenido al misterio.

no duermas para descansar, duerme para soñar. porque los sueños están para cumplirse.



miércoles, 23 de octubre de 2013

sus ojos se iluminaron.

verás, existe una conexión fundamental entre lo que uno parece y lo que uno es. a veces no somos capaces de verlo, pero todos nos convertimos en lo que fingimos ser. es psicología elemental. si vistes a un mendigo con ropa lujosa, la gente lo tratará como un noble, y el mendigo está a la altura de lo que esperan de él. pero eso es sólo la parte más pequeña. la verdad es mucho más profunda. todos nos contamos una historia sobre nosotros mismos. siempre. continuamente. esa historia es lo que nos convierte en lo que somos. nos construimos a nosotros mismos a partir de esa historia. conoces a una chica tímida y sencilla. si le dices que es preciosa, ella pensará que eres simpático, pero no te creerá. sabe que esa belleza es obra de tu contemplación. y a veces basta con eso. pero existe una manera mejor de hacerlo. le demuestras que es hermosa. conviertes tus ojos en espejos, tus manos en plegarias cuando la acaricias. es difícil, muy difícil, pero cuando ella se convence de que dices la verdad... de pronto la historia que ella se cuenta a sí misma cambia. se transforma ya no la ven preciosa. es preciosa, y la ven.


sabemos lo peligrosas que pueden llegar a ser las máscaras.

acceso directo a un ese gesto hecho cada día que puede cambiar la vida de una persona.

domingo, 20 de octubre de 2013

me resultas familiar, ¿te he amenazado antes?

sí, te mentí. no, no te quiero. ¡por supuesto que te hace gorda! nunca he estado en bruselas. se pronuncia "e-gre-gio", y, por cierto, no, no conozco a pizarro, pero me encantan sus obras. y todo esto carece de sentido a la luz del hecho de que mi barco ha vuelto a desaparecer, ¿comprendes?

-¡es de malfario llevar una mujer a bordo!
+sería mucho peor no llevarla.

acceso directo al peor pirata del que todos hemos oído hablar.

sábado, 19 de octubre de 2013

todo va demasiado deprisa.

bueno, voy a decir algo en voz alta que he estado intentando no decir en voz alta durante los últimos años. lo que tenéis él y tú, lo que pensé por un segundo que teníamos nosotros, lo que yo sé que algunos de nuestros mejores amigos tienen entre sí... yo quiero eso. lo quiero. sigo esperando a que ocurra, y a la espera de que suceda... creo que estoy cansada de esperar. y eso es todo lo que voy a decir sobre este tema.


quiero ese sentimiento otra vez. no quiero tener que elegir entre dos chicos, o quedarme sin ninguno. quiero ser una completa y terrible idiota para alguien.

acceso directo a una tarde paseando mientras vuelan las horas sin mirar el reloj.

lunes, 14 de octubre de 2013

sube el volumen todo lo que puedas.

coge esa camisa que nunca te pones porque piensas que es demasiado verde. hoy el día es demasiado gris, podrías necesitarla. y no te olvides del sombrero. todo el mundo debería tener un sombrero, y salir a la calle y quitárselo al pasar junto a un desconodido, deseándole un buen día. y prueba a ponerte un calcetín de cada color, y ríete internamente porque nadie, salvo tú, va a darse cuenta. quizá el hombre que está sentado a tu lado en la parada del autobús fumando un cigarrillo tras otro y arrebujado en su abrigo de michelín también lleva un calcetín de cada color. o una camisa demasiado verde. coge el bolso o la mochila más grande que tengas y llénalo de cosas que, en principio, pueden resultar innecesarias. luego, a lo largo del día, búscales una utilidad, sabrás encontrarla. vete al rincón más alejado de la ciudad, o al sistio al que menos sueles ir, y quédate allí un rato pensando en los motivos por los que nunca vas. llama al telefonillo de la casa de tu mejor amigo y dale una sorpresa, sólo para que veas que te acuerdas de él. cómprate una bufanda que pegue con tu camisa demasiado verde y unos pendientes que hagan juego con tus calcetines de distinto color... o no. total, nadie va a saber cómo son tus calcetines. pero tú sí, eso es lo que importa. los demás no. finge ser un turista en tu propia ciudad, y pregúntale a alguien cómo llegar a algún sitio. dale las gracias cuando te haya indicado y márchate en dirección contraria. cruza la calle pisando sólo las líneas blancas del paso de cebra, y apura hasta que el muñequito del semáforo eche a correr justo antes de ponerse en rojo de nuevo. tómate un café mientras lees el periódico al revés. nadie quiere ver malas noticias en estos momentos.


y sonríe. sonríe porque el día ha sido especial, y porque has hecho algo distinto y espontáneo. y vuelve a casa feliz, y no le cuentes a nadie lo que has hecho. todos necesitamos guardarnos algo para nosotros mismos, algo que nos caracterice y nos proteja. algo que podamos recordar cuando las cosas vayan mal, sin que nadie más pueda influir en ellos. guárdalo en tu memoria y consérvalo como un tesoro, aunque luego esos recuerdos no hayan dado frutos en el futuro.

acceso directo a un día gris aprovechado para hacer todas esas pequeñas cosas que te hacen feliz, sin que nadie pueda hacer nada para evitarlo.